Este establecimiento ofrece un entorno natural y tranquilo, donde la restauración ha permitido preservar el encanto histórico del edificio. Las 12 habitaciones están diseñadas para combinar la historia de la piedra original con el máximo confort actual, siendo ideales para una escapada relajante.

El compromiso del Molí Blanc Hotel se centra en ofrecer una experiencia completa a sus huéspedes, incluyendo servicios como gastronomía de proximidad (km 0), piscina, Wi-Fi gratuito y aparcamiento seguro, todo en un ambiente acogedor y familiar.

Además del alojamiento individual, el hotel dispone de servicios exclusivos como el alquiler completo de las instalaciones para celebraciones privadas, como bodas o reuniones de grupo. También ofrece espacios adaptados para eventos empresariales, aprovechando sus jardines centenarios y la arquitectura histórica.

Su ubicación es privilegiada, a solo cinco minutos de la autovía A2, lo que facilita el acceso desde Barcelona y otros puntos clave, combinando así tradición, confort y naturaleza. Para más información, se puede consultar el sitio web oficial del Molí Blanc Hotel: www.moliblanchotel.cat.