La Iglesia del Remei, construida entre 1846 y 1849 según el proyecto de Josep Oriol Mestres, presenta una fachada que fusiona elementos historicistas: un portal neorrománico, un rosetón neogótico y una cornisa neoclásica. La imagen de la Virgen es obra del escultor Pere Pagès.
El campanario, el elemento más característico del conjunto, fue añadido posteriormente en el año 1897 por Antoni Rovira i Rabassa, quien también completó la fachada. Tras quedar muy afectada por la Guerra Civil, la iglesia se restauró en 1941 y se amplió en 1967 bajo la dirección de Josep Rodríguez Lloveras.
Las pinturas interiores, de carácter neorrenacentista, son obra de Bàrbara Bibiloni, Cesc Grimalt y Tomàs Barceló (2010). Destacan las representaciones de las cuatro santas mujeres del Antiguo Testamento (Sara, Judit, Ester y Rut), poco comunes en el arte religioso.
En el lado derecho, en dirección al presbiterio, se encuentran representados cuatro hombres del Antiguo Testamento: Abraham, Moisés, David y Elías. El frontal del presbiterio muestra a los Doce Apóstoles y, bajo el retablo, los símbolos de los cuatro evangelistas: el ángel de Mateo, el león de Marcos, el toro de Lucas y el águila de Juan.
Este edificio, situado en el corazón de Les Corts, evoca el tiempo en que el barrio era una villa independiente de Barcelona. Hoy, sigue siendo la principal parroquia y el centro de la Fiesta Mayor, celebrada a principios de octubre en honor a la Mare de Déu del Remei, patrona del distrito.




