Los trabajadores de la cementera Uniland de Santa Margarida i els Monjos comenzaron los paros parciales este jueves, con concentraciones frente a la entrada principal de la planta. La protesta, que consiste en paros de cuatro horas en cada turno, se mantendrá activa hasta el próximo día 30 de diciembre.
El comité de empresa exige que los 25 trabajadores que se incorporaron a la compañía después del año 2016 reciban las mismas condiciones salariales que el resto de la plantilla. Esta demanda llega después de que el último intento de mediación, con la intervención de la Generalitat de Catalunya, fracasara el pasado miércoles.
“"No se quiere consolidar el salario de estos trabajadores y ayer miércoles, después de semanas de negociación del convenio, fracasó el último intento de mediación con la intervención de la Generalitat."
Felip Borlado, coordinador estatal del sector cementero de UGT-FICA, también ha denunciado los servicios mínimos “abusivos” decretados por la dirección de la empresa. Además, el sindicato señala que hay directivos que están realizando tareas que no les corresponden para garantizar los objetivos de producción durante la huelga.
Los sindicatos interpretan la negativa a consolidar los salarios de los 25 empleados como una estrategia a largo plazo para rebajar las condiciones laborales de todos los futuros trabajadores que se incorporen a la planta del Alt Penedès.




