Según los datos del Barómetro del CEO publicado el 24 de noviembre, un 10% de los catalanes considera la inmigración el problema principal del país. Este porcentaje ha aumentado notablemente durante la última década, pasando del 4,9% en 2015 al 7,2% en 2019. Paralelamente, la población extranjera en Cataluña también ha crecido, del 13,7% en 2015 al 18% en 2024.
El incremento de la preocupación no se correlaciona directamente con el aumento del flujo migratorio, lo que sugiere un cambio en la percepción social. Con motivo del Día Internacional de la Persona Migrante, varios expertos de Reus han analizado esta tendencia, incluyendo al sociólogo Rafael Böcker de la Universitat Rovira i Virgili (URV) y al periodista Carlos Iaquinandi.
“"Las redes sociales son una excelente oportunidad para los partidos populistas de extrema derecha."
Los expertos señalan que los simpatizantes de formaciones como Vox y Aliança Catalana son quienes, en mayor proporción, ven la inmigración como el principal problema y, a su vez, quienes más utilizan las redes sociales como fuente de información. Carlos Iaquinandi explica que estos mensajes “inculcan miedo a lo desconocido con mensajes distorsionados y embellecidos que apelan a las emociones y al rechazo”.
Esta construcción del “nosotros” y “ellos” se alimenta de temores identitarios. Rafael Böcker subraya que la extrema derecha “construyen la imagen del inmigrante a partir de aquello que lo hace visible y diferenciable: el color de la piel, la lengua que habla, pero también la vestimenta o sus costumbres”.
Frente a los tópicos sobre la competencia laboral y de vivienda, los expertos coinciden en definir la migración como una “doble oportunidad” para el estado receptor, especialmente ante el envejecimiento de la población y la necesidad de mano de obra en sectores como la agricultura, la construcción o los cuidados, tal como apuntan Irina Ravelo y Liliana Caballero de la Comunalitat El Rusc.




