El balance de los primeros 120 días de mandato de la nueva Junta del ICAB ha confirmado el rumbo de la entidad bajo el liderazgo de la decana Cristina Vallejo. El equipo ha logrado 32 hitos de los 100 retos fijados para la legislatura, demostrando una clara voluntad de servicio y método.
Estas mejoras refuerzan el papel del ICAB como interlocutor esencial ante las administraciones y lo sitúan de nuevo en el centro del debate legislativo catalán y nacional. El objetivo principal es prestigiar la institución para prestigiar, en última instancia, la profesión en un contexto de saturación y descrédito del sistema judicial.
Sin jueces, sin personal y sin digitalización, la eficiencia judicial no puede ser una realidad.
La decana Vallejo ha advertido públicamente de la imposibilidad de implementar al 100% la tercera y última fase de la Ley 1/2025 de Eficiencia Judicial en Barcelona el próximo 1 de enero sin los recursos necesarios. Esta advertencia se basa en la realidad diaria de los juzgados y no es una crítica gratuita, sino una defensa de la justicia.
Entre los déficits estructurales señalados, destacan la falta de los 55 jueces prometidos, la insuficiencia de recursos económicos y de personal, y la digitalización pendiente de la jurisdicción penal. La experiencia de la fase 2 ya evidenció problemas graves en la gestión de recursos humanos, con un uso excesivo de interinos.
A pesar de la alerta, la decana apuesta por el diálogo y la implementación progresiva. Las reuniones periódicas con el TSJC y con la Conselleria de Justicia y Calidad Democrática son un ejemplo de una gestión basada en la cooperación institucional para defender la justicia y a quienes la sostienen.




